lunes, 27 de agosto de 2012


Concurso sobre desertificación, organizado por el Municipio de Cnel. Pringles
¡Felicitaciones a Juan Manuel Jauregui y Nicolás Baleix que obtuvieron el 2º premio!
A continuación todos los alumnos de 3º "A" quieren compartir sus producciones o poesías sobre la desertificación en nuestra zona:

La mirada se pierde
es esta llanura desierta.
Las manos trabajadoras de nuestros abuelos
ahora se ven reflejadas en la seca tierra.
Las aguas que fluían, hoy  se van
por un camino de maltrato y sin final.
Ahora se ve su destrucción
color desierto, sin amor…
Con ojos llorosos los animales observan
nuestras terribles acciones sin rencor.
Las pasturas  cubiertas por  fría tierra.
¿Qué pensamos hacer? debemos buscar una solución.
Volverán
Volverán... aquellas verdes esperanzas
Las esperanzas del campesino
se evaporan como el río
se mueren como el árbol sin agua
y quedan desparramadas sobre el camino
Aquellos campos dorados
que hoy no existen más
lo hacen llorar de lástima
a aquel humilde capataz
La tarde está muriendo
y él galopa desganado
sobre aquella tierra fértil
 
de la que ya no hay rastros.
Y aquel campesino
que al despertar
se promete todas las mañanas
que sus tierras verdes
algún día volverán...

La esperanza del campesino
¿Por qué el mundo está así,
por qué la gente no valora
lo que nos queda?
Algunos aun no lo notan
otros, ya lo estamos sufriendo
sintiendo que ya no está
nuestro paisaje querido .

El suelo es un testigo mudo
de este sufrimiento tremendo
La naturaleza guarda el recuerdo
de aquellas aguas cristalinas,
los animales sufren la contaminación
las plantas ya no recuerdan el sonido
de las gotas bailando sobre sus hojas .
todo esto es consecuencia,
de esta preocupante sequía,
que nos hizo abrir los ojos .

Si todos nos unimos

y valoramos lo que tenemos
nuestro lugar va a cambiar,
manteniendo la esperanza
a este suelo volver a cultivar...
El agua , esperanza de mi pueblo
La mirada se pierde
en un campo seco, sin verdes
Muy mal me siento yo
Cuando recuerdo viejos tiempos
Ver el molino con el viento
Desplazando y dando agua,
Regalando con amor
En este momento les cuento
Lo mal que se está pasando
El suelo se está secando
Y con él, la esperanza
De que un día nuestros hijos
Vuelvan a cultivarlo.
Pienso yo en este instante
Que se puede mejorar
Con esfuerzo y con afán
Lo superaremos unidamente
Como lo hacen las personas
Que se esfuerzan realmente.


Tiempos de cambiar
Cuando voy al campo
Lo veo infinito a su suelo partido
Ninguna gota de agua, ni un animal
Desierto como un pueblo fantasma

El esfuerzo  mi abuelo se ve
En sus  manos que a grietadas tiene
¿Algún día cambiará el paisaje?
Si seguimos actuando así
Hoy podría afirmar que no

La tristeza me acobarda
de tanta sequía injusta
El corazón me deja de latir
Mi cuerpo se paraliza
La tierra está agrietada, muy seca
La sangre en mis venas bulle
Y le repito a mi abuelo
Una y otra vez:
"dale, sigue, no te rindas”          

Ayer un sueño… hoy un recuerdo…
La tristeza invade nuestros corazones,
La mirada se pierde en la llanura desierta
¿Acaso supimos cuidar lo nuestro?

Las historias de estos suelos
Los sueños del labrador
Quedan hoy en el olvido
De aquel último adiós

El suelo fértil que tanto
Supimos trabajar
Hoy ya no podemos admirar
Ese agua que tanta falta nos hace
Y que nunca supimos valorar.




Es hora de pensar...
Los sueños de un labrador,
se esfumaron hace tiempo 
por nuestras irresponsables acciones 
ya no existirán mas los verdes llanos
ni los suelos fértiles tan codiciados.
los suelos casi quebrados.

Los animales muertos están  
como la esperanza  guardada
en un cajón, olvidados.

No supimos cuidar,
el tesoro que nos dejaron 
trabajadores incansables del campo, 
lagunas de agua cristalina 
que se secaron...

¡Qué lástima, no sabemos valorar 
los recursos que la naturaleza nos da!  


No supimos cuidar
Suelos fértiles regalaban, 
Que no supimos cuidar.
Esa sequía terrible, 
La esperanza nos ha de quitar.

Mirar al horizonte y pensar...
¿Qué será de nuestros hijos?
¿Qué futuro ellos tendrán?
Si los verdes campos, ya no están.

Adiós le dijimos a esos sueños
Que pensábamos concretar,
Esos sueños de tierra fértil
Por toda la eternidad.

Para algunas personas esperanzas quedan,
Esperanzas de cambiar,
De conservar lo poco que nos queda, 
En esta triste verdad.

Y así poder asumir
La realidad que nos toca vivir...
Íntegra responsabilidad nuestra,
Que debemos revertir.          

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